Todos necesitamos viajar seguros en invierno, vayas a hacer un voluntariado o un viaje turístico. Por eso mismo, hoy te traemos un artículo con consejos que asegurarán que tu escapada en el momento más frío del año salga redonda, vayas en coche, avión, bus o tren.
Planifica tu ruta
Antes de salir, planifica tu ruta teniendo en cuenta las condiciones meteorológicas y las carreteras. Infórmate bien y no te pillarán desprevenido.
Por lo que pueda pasar, deja un plan detallado de tu viaje con alguien de confianza, incluyendo tu ruta y horarios estimados.
Retrasa tu salida si es necesario
Si las condiciones climáticas son adversas, considera retrasar o adelantar tu viaje para garantizar tu seguridad.
Piensa que, así, te ahorrarás problemas graves de seguridad. Imagínate que por salir media hora antes acabas teniendo un accidente. Salir cuando amaine es la mejor manera de evitar estas situaciones.
Revisa la mecánica de tu coche
Antes de partir, asegúrate de que todos los sistemas de tu vehículo estén en buenas condiciones, incluyendo el sistema de refrigeración, el nivel de líquido anticongelante, los filtros, el agua del limpiaparabrisas, el alumbrado, los neumáticos y las escobillas del limpiaparabrisas.
Lleva cadenas para la nieve
Nunca salgas sin cadenas para la nieve, sobre todo si vas a pasar por zonas donde sabes que ha nevado o podría nevar. De hecho, mejor, llévalas siempre en invierno. Ten en cuenta que su uso es fundamental para mantener el control del vehículo en carreteras nevadas, y de hecho podrían multarte si te pillan sin ellas en situaciones extremas.
Llena el depósito de combustible
Siguiendo con el tema del coche, te recomendamos que llenes el combustible del tanque hasta arriba antes de salir. Esto es muy importante en situaciones así, ya que es fácil encontrarse atascos por el mal tiempo, y no quieres quedarte sin gasolina en uno de ellos.
Vigila con tu velocidad al volante
Durante el viaje, modera tu velocidad según las condiciones del camino y el clima, para evitar accidentes. Piensa que es muy peligroso ir a toda velocidad con niebla o lluvia, incluso si vas por debajo de lo que dice la ley. Usa el sentido común.
Con lluvia, niebla o nieve, la adherencia del vehículo al asfalto disminuye. Por ello, aumenta la distancia de seguridad con respecto a otros vehículos.
El viento fuerte puede ser peligroso, especialmente en puentes y zonas abiertas. Mantén un control firme del volante y reduce la velocidad.
Evita zonas sombrías y el interior de las curvas donde se acumula hielo, y enciende las luces de cruce y la luz antiniebla trasera en caso de lluvias intensas.
Vigila mucho con el consumo de alcohol, tan típico y peligroso en estos días festivos. Si bebes, no conduzcas. Y si sales muy tarde, programa descansos regulares durante tu viaje.
Prepara bien tu maleta
Lleva ropa cálida, calzado adecuado y provisiones en caso de emergencia, como comida, agua y mantas. Recuerda todo lo que te dijimos en nuestro artículo sobre preparar tu maleta de viaje.
Llévate un kit de supervivencia
Además de saber preparar tu maleta de viaje, tienes que asegurarte de que te vas de casa con equipaje que pueda ayudarte en el caso de un incidente. Piensa en que esta época del año tiene sus particularidades, y tendrás clarísimo qué llevarte por si ocurre cualquier cosa.
- Pala: Imagínate que te quedas atrapado en la nieve. ¿La vas a sacar toda con tus manos, aunque lleves guantes? Por supuesto que no. Necesitas una pala, aunque sea de esas pequeñas y plegables. No ocupa mucho espacio en el maletero.
- Linterna: En esta etapa del año oscurece muy pronto. Por eso, la oscuridad será tu amiga incansable en los viajes que hagáis en coche. Llévate una linterna potente, a poder ser que no necesite pilas. Si las necesita, ten siempre a mano unas pilas de repuesto, por si llegas a necesitarla encendida por mucho tiempo.
- Ropa extra: Deberías de tener en tu coche algunas piezas extra de ropa, o incluso una manta. Todo esto servirá si, de repente, os pilla una ventisca o la misma nieve, que suele enfriar mucho el ambiente. También, te recomendamos que lleves algo de calzado antideslizante, si pretendes caminar por lugares helados.
- Provisiones extra: Ten siempre comida de urgencia por si llegáis a quedaros varados. Necesitarás energía extra si de repente tu coche se queda atrapado con la nieve, y tienes que darle duro con la pala para salir de ahí. También, es posible que necesites más ayuda extra, y esta suele tardar en llegar cuando el tiempo está tan mal.
Por supuesto, somos conscientes de que en invierno no solo se viaja en coche. A continuación te hablamos de los vuelos, el otro tipo de medio de transporte más empleado en estas fechas.
Confirma y revisa tus vuelos
Durante el invierno, las condiciones climáticas pueden causar retrasos y cancelaciones en los vuelos. Asegúrate de confirmar tu vuelo antes de dirigirte al aeropuerto y considera la posibilidad de registrarte en línea para ahorrar tiempo.
Además, mantente al tanto de las actualizaciones del estado de tu vuelo mediante las aplicaciones de aerolíneas o alertas por correo electrónico o SMS.
Prepárate para esperas inesperadas
Las demoras son comunes en los aeropuertos durante el invierno. Lleva contigo entretenimiento, como libros o una tableta cargada, y snacks para hacer más llevadera la espera.
Además, ten a mano una batería externa para tus dispositivos electrónicos. Considera también llevar artículos de higiene personal básicos en tu equipaje de mano para mayor comodidad durante esperas prolongadas.
Considera alternativas de transporte
Si el avión te da combinaciones poco prácticas, explora otras opciones de transporte para tu viaje, como trenes o autobuses. Estos medios a menudo son menos susceptibles a las interrupciones por mal tiempo que los vuelos.
Además, viajar en tren o autobús puede ofrecerte paisajes invernales únicos y una experiencia de viaje más relajada y pintoresca.
Prepara tu viaje invernal en tren
Antes de embarcarte en tu viaje en tren durante el invierno, es crucial planificar con anticipación.
Reserva tus billetes con antelación, especialmente en rutas populares, para asegurar tu plaza. Considera elegir asientos cerca del centro del vagón, donde suele ser más cálido y menos propenso a corrientes de aire.
Lleva contigo una manta pequeña y un cojín de viaje para mayor comodidad, ya que las temperaturas dentro del tren pueden variar.
Además, mantente informado sobre el estado de las vías ferroviarias, puesto que las condiciones invernales pueden causar retrasos.
Las apps suelen ofrecer actualizaciones en tiempo real, lo que te ayudará a ajustar tus planes si es necesario.
Viajando en bus en invierno
Viajar en autobús o autocar durante el invierno también se las trae.
Asegúrate de llegar al punto de salida con suficiente antelación, ya que el mal tiempo puede retrasar tu llegada a la estación de autobuses.
Vestirse con varias capas es esencial para poderte adaptar a las diferentes temperaturas que podrías experimentar durante el viaje. Si te sobra alguna capa, ya te la sacarás cuando estés dentro del bus.
Además, lleva contigo snacks y bebidas en un termo para mantener tu energía y estar hidratado.
Es vital tener a mano los números de contacto de la compañía de autobuses y estar al tanto de los horarios actualizados, ya que pueden cambiar por el tiempo.
Tener la información de contacto de tu alojamiento a mano también es útil en caso de que necesites comunicar cambios en tu hora de llegada.
Contrata un seguro para tu viaje de invierno
El invierno puede ser muy traicionero, y por eso te puede ser superútil tener contratado un seguro de viaje con nosotros. Esto te permitirá cubrirte ante cualquiera de los contratiempos que te hemos mencionado.
Incluso, podrías cubrir la posible cancelación de tu viaje en caso de que puedan cambiar los planes en Navidad, algo que puede ocurrir con cierta facilidad por los caprichos del tiempo.
No te expongas a peligros innecesarios durante esta etapa del año. Viaja seguro en invierno con nuestros consejos y recuerda consultarnos si quieres encontrar el seguro ideal para tu situación.
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