¿Así que quieres saber cuánto cuesta un seguro a todo riesgo? Bueno, en este artículo no solo te vamos a responder a esa pregunta, es que también vas a entender por qué un seguro a todo riesgo puede costar más o menos que otro, y otros muchos matices que te ayudarán a elegir la mejor alternativa para ti.
Si sigues teniendo dudas, podrás contactar con nosotros para que te asesoremos sobre la mejor alternativa en tu caso concreto. Vamos, que de aquí saldrás con una decisión muy clara.
¿Cuánto cuesta un seguro a todo riesgo de un coche?
Aquí viene la respuesta corta: depende. Pero no te preocupes, que no te vamos a dejar con el «depende» y ya está. Vamos a explicarlo bien.
En España, el coste de un seguro a todo riesgo puede ir desde los 800 € hasta más de 2.100 € al año, dependiendo de estos factores y las coberturas adicionales que elijas.
Piensa que un seguro a todo riesgo cubre tanto los daños que puedas causar a terceros como los de tu propio coche, pase lo que pase. Esa es la razón principal por la que esta modalidad suele ser la más completa, y claro, también la más cara. Pero hay muchos factores que influyen.
Por ejemplo:
- El tipo de coche que tienes: ¿Es un coche nuevo o de gama alta? Entonces prepárate para pagar más. Por otro lado, si es un coche antiguo, quizá esta modalidad no te salga tan a cuenta.
- Tu perfil como conductor: La experiencia al volante, tu historial de siniestros y hasta tu edad pueden marcar la diferencia. Si eres un conductor joven o con poca experiencia, las aseguradoras suelen «ponerse nerviosas» y subir un poco el precio.
- Dónde vives: Sí, la zona también cuenta. Las grandes ciudades con más tráfico y riesgo de accidentes suelen encarecer las pólizas.
Todo esto te lo explicábamos también en nuestro artículo sobre cuánto cuesta el seguro del coche, donde te describíamos más tipos de seguros.
¿Qué cubre un seguro a todo riesgo?
Cuando hablamos de un seguro a todo riesgo, hablamos de la modalidad más completa y protectora que puedes contratar para tu coche. Aquí tienes un resumen de lo que suele incluir, lo que se conoce como «coberturas». Conócelas bien y, aquellas que consideres que necesitas, tenlas en cuenta para decidirte por uno u otro seguro:
Responsabilidad Civil Obligatoria y Voluntaria
La Responsabilidad Civil Obligatoria es imprescindible para circular por España. Es lo que tiene cualquier seguro obligatorio de coche, porque se encarga de pagar los daños que puedas causar a otras personas, vehículos o propiedades hasta los límites establecidos por ley.
Además, muchas pólizas incluyen la Responsabilidad Civil Voluntaria, que amplía esos límites para protegerte frente a reclamaciones más altas. Vamos, que te ahorras muchos dolores de cabeza si algo se complica.
Defensa jurídica y reclamación de daños
En caso de que un accidente acabe en los tribunales, la aseguradora te ofrece asesoramiento legal y defensa jurídica. Eso sí, ¡ojo con la letra pequeña! Algunas compañías reducen su aportación si decides contratar a tu propio abogado. Es un detalle que merece la pena revisar antes de firmar.
Rotura de lunas
¿Una piedra en la carretera te ha roto el parabrisas? No te preocupes, esta cobertura se encarga de reparar o sustituir las lunas de tu coche, incluido el techo solar si es de serie. Eso sí, fíjate en si tienes que acudir a talleres concertados o si puedes elegir libremente dónde hacer la reparación.
Robo e incendio
Si tu coche sufre un robo (o un intento) o un incendio, esta cobertura asume los gastos derivados. Algunas aseguradoras también incluyen los objetos robados del interior del coche, aunque esto puede variar. Importante: revisa cómo valoran el coche en caso de pérdida total, ya que suele depender de su antigüedad.
Daños propios
Esta es la cobertura estrella de los seguros a todo riesgo. No importa si eres el culpable de un accidente: los daños a tu coche están cubiertos. Ahora bien, recuerda el tema de los talleres concertados… y si hay un límite de partes o de coste. Ahí está la clave.
Asistencia en carretera y viaje
¿Te has quedado tirado en mitad de un viaje? Con esta cobertura, la aseguradora se hace cargo de la grúa, el traslado de tu coche al taller, e incluso la reparación in situ si es posible.
Además, también puede incluir asistencia sanitaria, gastos de hotel si el coche se queda inmovilizado y hasta traslados si necesitas seguir tu viaje.
Vehículo de sustitución
Si tu coche queda fuera de combate tras un accidente o avería, muchas aseguradoras te ofrecen un coche de sustitución para que sigas con tu vida.
Dependiendo de la compañía, incluso pueden llevártelo y recogerlo en tu casa. Eso sí, el número de días que lo puedes usar varía según la póliza.
Seguro del conductor
Esta cobertura cuida de ti en caso de sufrir un accidente y resultar herido. Incluye una indemnización económica que dependerá de las lesiones sufridas y cubre los gastos médicos derivados del accidente. Además, en caso de fallecimiento, también protege a tu familia.
Fenómenos meteorológicos
Ya sea granizo, inundaciones o la caída de un árbol sobre tu coche, esta cobertura entra en juego para cubrir los daños. Perfecto si vives en una zona con un clima impredecible o si aparcas al aire libre.
Cursos de recuperación de puntos
¿Has perdido puntos del carnet? Algunas aseguradoras incluyen en sus pólizas los costes de los cursos de la DGT para recuperarlos. Eso sí, puede variar: unas cubren todos los gastos, mientras que otras solo pagan la matrícula.
Cada aseguradora tiene sus particularidades, así que antes de decidirte, revisa bien qué incluye tu póliza. Si tras saber cuánto cuesta un seguro a todo riesgo quieres escoger el tuyo pero no te apetece liarte con los tecnicismos, ya sabes, pregúntanos, y te ayudamos.